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Los precios del autobús interurbano suben cuando más necesario es para los consumidores

El transporte más humilde, el coche de línea, va camino de ser un lujo. En apenas dos meses, se han sucedido dos subidas en el transporte interurbano por carretera. En marzo, una del 3%, autorizada por el Ministerio de Fomento para compensar el encarecimiento del combustible, y en abril otra del 2,45%, en la actualización anual y automática por el aumento del índice de precios al consumo (IPC) medio del año 2012. En total 5,45% de subida media, que se acumula a las de años precedentes.
En los últimos años el autobús interurbano no ha dejado de incrementar su precio. Eso se ha notado en el número de pasajeros, que ha disminuido, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), un 3,3% respecto a 2012. El incremento del precio podría ser aún mayor en el futuro. Está en proceso de tramitación parlamentaria el anteproyecto de modificación de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT), que permitirá a las empresas que prestan servicios regulares de transporte público de viajeros por carretera solicitar "de forma individual" al Ministerio de Fomento realizar una subida extraordinaria del precio del billete en caso de que la línea que explotan en concesión presente un desequilibrio económico. ¿Barra libre para subir más los precios?
Con estas medidas, que se suman a la supresión de líneas, se está poniendo en riesgo la movilidad de millones de consumidores. El último año (datos del INE a febrero de 2013) 102.623.000 de pasajeros hicieron uso del autobús interurbano. Una cantidad de viajeros que no puede ser asumida por otros tipos de transporte, como el tren -que no llega a todas las localidades-, y que en muchos casos, sobre todo en el medio rural, se desplazan por necesidades de primer orden, como visitas médicas o administrativas. En plena ola de supresión de servicios públicos, no queda otro remedio que desplazarse para recibirlos allí donde están. ¿Hasta cuándo podrán los consumidores más afectados por la crisis afrontar las subidas continuas del transporte?
Además, hay que considerar los beneficios que tiene para el medioambiente el uso del transporte público.
Viaje siempre con sus derechos
Quizás viajar sea más caro, pero por lo menos ahora a bordo se suben nuevos derechos. A partir del pasado 1 de marzo de 2013 entró en aplicación el Reglamento sobre los derechos de los viajeros de autobús y autocar. Este reglamento se aplica en su totalidad a los servicios de larga distancia (es decir, de más de 250 km), mientras que solamente algunas de sus disposiciones son válidas para los trayectos más cortos.
Los nuevos derechos aplicables a los servicios de larga distancia (más de 250 km) incluyen entre otros:
- Asistencia adecuada en situaciones de cancelación o a raíz de un retraso de más de 90 minutos en el caso de un viaje de más de tres horas. Esto incluye el servicio de refrigerios, comidas y refrescos y, en caso necesario, alojamiento durante un máximo de dos noches, por un importe total de 80 euros por noche (excepto en caso de condiciones climáticas adversas y catástrofes naturales importantes).
- Garantía de reembolso o transporte alternativo en situaciones de exceso de reservas (overbooking) o en caso de cancelación o de retraso de más de 120 minutos respecto a la hora prevista de salida.
- Indemnización del 50% del precio de billete a raíz de un retraso de más de 120 minutos respecto a la hora prevista de salida, cancelación del viaje y si el transportista no ofrece al viajero un transporte alternativo o el reembolso.
- Información cuando el servicio sufra una cancelación o un retraso en la salida.
- Protección a los viajeros en caso de fallecimiento, lesiones, pérdidas o daños causados por accidentes de carretera, en particular en relación con las necesidades prácticas inmediatas en caso de accidente (incluido hasta dos noches de alojamiento en un hotel por un total de 80 euros por noche).
- Ayuda gratuita y especializada para las personas con discapacidad y para las personas con movilidad reducida, tanto en las terminales como a bordo de los autobuses y autocares, y, si fuera necesario, transporte gratuito para los acompañantes.
Además de los anteriormente citados, hay derechos comunes tanto para la larga como la media y corta distancia en autocar:
- No discriminación respecto a las tarifas y condiciones contractuales de los pasajeros basada - directa o indirectamente - en la nacionalidad.
- Trato no discriminatorio a las personas con discapacidad y a las personas con movilidad reducida, y compensación financiera por la pérdida o deterioro de su equipo de movilidad en caso de accidente.
- Información mínima del viaje a todos los pasajeros antes y durante el mismo, así como información de carácter general sobre sus derechos en las terminales y en línea.
- Un mecanismo de tramitación de las reclamaciones a disposición de todos los viajeros.
¿Cómo reclamar si se incumplen nuestros derechos?
En caso de tener algún problema con una empresa de transporte de viajeros, sea tanto de autobús urbano como interurbano, solicite el libro de reclamaciones, que deben estar a disposición del consumidor en los vehículos, terminales, taquillas y oficinas. Para interponer la reclamación, es imprescindible presentar el billete válido e identificarse mediante el Documento Nacional de Identidad, pasaporte o tarjeta de residencia en vigor. La reclamación no garantiza una posterior indemnización, por lo que también se puede formular la queja acudiendo a los organismo de consumo pertinentes en cada comunidad autónoma. En ADICAE encontrará información y asesoramiento sobre cómo reclamar.