Nota de prensa
HIPOTECAS04/12/2008
ADICAE aplaude la bajada del 0,75 del BCE pero critica la falta de medidas estructurales y eficaces para combatir el sobreendeudamiento de las familias
ADICAE advierte que la bajada de tipos no resolverá los graves problemas a que se enfrentan millones de hipotecados, que no sentirán los efectos de la bajada de tipos
El divorcio entre el Euribor y el tipo del BCE genera dudas sobre el impacto real de la rebaja
La Plataforma Hipotecaria de ADICAE reclama un "Pacto de Estado por la estabilidad financiera de las familias"
Si bien quiénes revisen su hipoteca en febrero de 2009 con base al euríbor de diciembre verán “previsiblemente” reducidas sus cuotas en torno a 95 euros con respecto al año pasado, en términos globales y tomando como partida la cuota inicial del año de contratación, el importe mensual a pagar sólo se reducirá para quiénes contrataron a partir de febrero de 2007. Los cientos de miles de familias que firmaron sus hipotecas en febrero de 2003, 2004, 2005 y 2006 estarán pagando entre 60 y 100 euros más que en el momento de la contratación. Sin embargo, estas estimaciones podrían revelarse demasiado optimistas dado el divorcio existente entre los tipos del BCE y el euríbor.
La decisión del BCE de bajar los tipos es una medida que beneficia indirectamente a los consumidores pero que responde a la necesidad de que los bancos tengan liquidez para seguir prestándose dinero entre ellos, a empresas y a consumidores. ADICAE, que da la bienvenida a la nueva rebaja de tipos en tanto en cuanto puede beneficiar a algunos consumidores que tengan que revisar sus hipotecas en los primeros meses del año, critica, sin embargo, la falta de medidas concretas y estructurales para paliar la grave situación de sobreendeudamiento que sufren cientos de miles de familias.
En este sentido, y dada la grave situación que atraviesan los consumidores hipotecados en España y en especial las 165.000 familias en impago o grave riesgo de embargo, la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (www.adicae.net) propondrá al Ministerio de Sanidad y Consumo y al Banco de España, así como a las Consejerías de Consumo y de Economía de las Comunidades Autónomas, que adopten de urgencias las medidas técnicas y organizativas imprescindibles para que las juntas arbitrales de consumo desempeñen funciones de reordenación de deudas. Asimismo, ADICAE se dirigirá al Ministerio de Justicia para proponer un procedimiento específico para que un juzgado de cercanía reordene la deuda de los consumidores, limite tipos, reduzca deudas, etc en línea con la Ley de Sobreendeudamiento Familiar reclamada por ADICAE y de la que ya disponen la mayoría de los países de nuestro entorno.
La política monetarista de la UE ha fracasado
La política "monetarista" de la UE, basada en la regulación de los flujos de dinero a través de tipos de interés ha fracasado dejando a la economía real subordinada a decisiones que no tienen en cuenta aspectos y necesidades sociales de los ciudadanos. En este sentido, la crisis impone la necesidad de replantearse un BCE más implicado socialmente, con mayor representación de los sectores ciudadanos. Lo mismo cabe predicar del Banco de España. En este sentido, ADICAE ha señalado la conveniencia de suspender la referencia al euríbor como índice hipotecario, medida ya adoptaba en países como Italia, y que se establezca por el Banco de España un tipo objetivo sustitutivo del Euribor, (como el propio tipo del BCE) que opere subsidiariamente en momentos en que los consumidores no puedan pagar su préstamos (paro, etc) y durante el tiempo en que se encuentre en esta situación.
Hay que mirar más allá de la necesaria bajada del tipo de interés
Si centramos el debate en la bajada de tipos de interés corremos el riesgo de olvidar otros aspectos que contribuyen a la pérdida de poder adquisitivo y al sobreendeudamiento excesivo de las familias. Tal y como ha podido poner de manifiesto la Plataforma Hipotecaria de ADICAE, los consumidores hipotecados padecen todo un rosario de condiciones y cláusulas financieras abusivas, impuestas por las entidades de crédito, toleradas por algunos Notarios en connivencia con bancos y cajas de ahorros, y consentidas por el Banco de España despreocupado por esta circunstancia y cuya misión se limita a ser mero "mensajero" e informador de los "consejos" de la banca. En muchas ocasiones las propias condiciones hipotecarias han originado que muchas familias, pese a no ver reducidos sus ingresos, no puedan hacer frente a sus cuotas mensuales, como consecuencia de un producto aberrante como las llamadas hipotecas de cuota creciente, que han multiplicado literalmente las cuotas de miles de usuarios. Por otro lado, las medidas que unilateralmente están ofreciendo muchas entidades son limitadas e insuficientes. El consumidor que suscribe un préstamo hipotecario se ve gravado con un exceso de garantías (garantías reales, personales, avalistas, productos vinculados), que demuestra un desequilibrio exagerado entre el cliente y la entidad.
Necesitamos un "Pacto de Estado por la estabilidad financiera de las familias"
Ahora que se está pretendiendo impulsar el consumo interno (de nuevo las familias cargan con la economía) hay que establecer un gran "Pacto de Estado por la estabilidad financiera de las familias", con presencia de las asociaciones de consumidores, que fije mecanismos inmediatos de corrección de deudas, y elabore reformas legales que verdaderamente equilibren derechos del consumidor.